MANUEL SCORZA EN EL CORAZON

MANUEL SCORZA EN EL CORAZON
(Homenje al escritor en el 95 aniversario de su nacimiento)
 

Manuel Scorza, nacido en Lima el 9 de setiembre de 1928, era un literato genial. Sus obras nos conmueven y hacen cavilar sobre hechos que sucedieron en realidad y que, por algún motivo, la Historia oficial no los cuenta. Con categórica pluma pone en evidencia el Derecho civil del país, la muestra tal como funciona, con errores de interpretación y aplicación por parte de letrados soberbios que insultan y golpean a los que consideran sus inferiores y mal administran la justicia como el caso del Juez Francisco Montenegro.

El escritor denuncia los atropellos cometidos por malas autoridades y el abuso de la compañía “Cerro de Pasco Corporation” contra los campesinos con los que adquirió un compromiso vitalicio y aspiraba a un mejoramiento de sus condiciones de vida, que pudieran trabajar su propia parcela, acceder a una vivienda digna. Por ello, saludó el golpe que el gobierno de Velasco asestó al latifundio mediante la nacionalización de las grandes empresas transnacionales, entre ellas la “Compañía” que fomentó el Cerco en su monumental novela. La publicación de "Redoble por Rancas" tuvo tal repercusión que el Gobierno ordenó la salida de Héctor Chacón, campesino encarcelado por defender sus tierras. El mismo escritor asistió a la liberación de su amigo y a la vez uno de los personajes centrales de su novela.

Scorza anhelaba una sociedad peruana más equitativa, sin terratenientes latifundistas ni corporaciones trasnacionales que se adueñen de la tierra y exploten vilmente la fuerza de los pobres. Creía que era posible lograrlo mediante el diálogo del Gobierno y el Pueblo. Y era además consecuente con sus ideas. Declinó gentilmente el ofrecimiento del general Velasco de ocupar un cargo público alegando que un escritor también sirve a su país con su arte.

Sus obras fueron traducidas a más de 30 idiomas en las décadas de los 70 y 80 aunque en Perú apenas se las leía, quizás porque no las conocíamos. Salvo alguna editorial, nadie promocionaba las obras de Scorza. Era un invisible en nuestro ámbito cultural pesar de que gozaba ya de fama mundial Se le ignoraba, tal vez porque escribía sobre campesinos y participaba en una facción de la izquierda política.

Scorza marcó un precedente en su etapa de editor. Promocionó el libro y ganó innumerables lectores. Presentó a autores noveles y consagrados en los festivales de libros que organizó tanto en Perú como en otros países de América. Con inefable entusiasmo impulsó la cultura literaria en nuestros pueblos aún en formación.

Antes que editor era poeta. Por la riqueza de su poemario “Las Imprecaciones” obtuvo el Premio Nacional de Poesía. Luego pasó a novelista. ¡Cómo no reconocer la asombrosa calidad literaria de sus obras! Ellas nos sumergen en un mundo fascinante, donde refluyen hechos míticos, históricos, fantásticos y reales. Manuel nos seduce con su voz delirante, agónica, épica. Es la voz del Pueblo que pugna por sobrevivir en su propia tierra hostilizada por el poder de las transnacionales. Es el ventrílocuo popular, con hilarante inspiración nos presenta hechos visibles a todos pero que nadie, por incapacidad o desinterés, quiere ver u oír y mucho menos interpretar.

Era un hombre plural, apasionado e inquieto por naturaleza hurgó en las lindes de la prestidigitación, la magia y los misterios de la vida y no aceptó jamás la imposición cultural proveniente de los poderosos, luchó contra ellos con todas sus fuerzas. Siempre fiel y solidario con los marginados, con los que nada tienen, con los que sufren las injusticias sociales. Era un rebelde impetuoso contra el estatismo y la hipocresía heredada del Coloniaje y el Republicanismo criollo. Apostó por un Perú mejor, donde no cupieran las diferencias sociales, ni la vil explotación humana y la pobreza. Manuel Scorza, preclaro ave fénix poético, reflotó la literatura peruana del siglo XX.

Su Ciclo “La Guerra Silenciosa” es un canto épico al enfrentamiento de los comuneros contra el poderoso bloque de latifundistas y representantes de la “Cerro de Pasco Corporation”, ocurrido entre 1950 y 1962. Al inicio, el ingenuo poeta, el soñador de un mundo mejor, sufre lo indecible mientras con su canto revela la represión salvaje, el sometimiento de campesinos por la fuerza, la masacre impune. En el transcurso de la lid el bardo indignado, recopila más documentos, recoge nuevos testimonios y luego experimenta la realidad como secretario de política del Movimiento Comunal del Perú. Revestido de garabatos y vivencias indispensables, redobla su accionar. Enarbola su inquieta pluma como arma de lucha. Con rápido ingenio, extrae una muestra vacía de la Historia Contemporánea y la rellena con sucesos míticos que al trasluz, al ser leídos, adquieren realidad y dimensión literaria. Ha surgido el genio, pletórico de recursos lingüísticos, ha completado la Historia que estaba pendiente.

Sus obras literarias poseen un rico valor artístico, social, humano. Y por su ardorosa lucha, con su pluma y su acción, en favor de los campesinos pervive en el corazón del Pueblo. Un hombre extraordinario, que un día fue candidato al Nóbel de Literatura, que emprendió la edición de un millón de libros en América Latina, que fomentó la lectura entre la gente con sus Populibros. Nuestro ilustre compatriota fatalmente murió en un accidente aéreo, el 27 de noviembre de 1983, a los 55 años, cuando soñaba con una gran novela social que volviera a izar la letras peruanas en lo alto de la literatura universal.

9 de setiembre de 2023

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