CHARLES DICKENS

 
 
 
 
EL REALISMO SENTIMENTAL DE DICKENS
 

 
 
 
 
EL REALISMO SENTIMENTAL DE DICKENS
 
Charles Dickens nació el 7 de febrero en 1812 en Portsmouth (Inglaterra) en un hogar humilde. Sus padres eran sirvientes en la casa de un diputado inglés. El padre de Charles, con la ayuda de su patrón John Crewe consiguió trabajo como funcionario aunque pronto a causa de sus deudas fue encarcelado en 1824. Charles, aún sin cumplir los 12 años, entró a trabajar en una fábrica de crema para calzado; así pudo mantenerse y ayudar a su familia. Una experiencia que marcó su vida. Soportó la angustia, el dolor y la humillación, sufriendo en silencio la ruptura de su juvenil ilusión de estudiar y llegar a ser un hombre importante De su etapa de niño obligado a trabajos inhumanos surgirán pasajes de sus futuras novelas con personajes sometidos a castigos injustos y sufrimientos patéticos.
 
El pequeño Charles parecía condenado a permanecer en estado servil toda su vida. Pero, un golpe de suerte lo arrancó de aquella condición miserable. Su familia recibió una herencia inesperada. Su padre pudo salir de la cárcel y Charles ya joven decidió dedicarse a escribir sus experiencias vividas en la fábrica y los recovecos callejeros más oscuros de Londres, así desahogaría su pena soportada y su rabia contenida durante los años de su juventud perdida.
 
Hacia 1828, empezó a esbozar garabatos autobiográficos mientras se instruía para un cargo de secretario legal en el Parlamento. Se desempeñó luego como periodista; escribía crónicas para un Colegio de abogados y crónicas parlamentarias para diversos periódicos, entre ellos “The Mirrow of Parliament” y “The Morning Chronicle”.
 
Entre 1832 y 1834, con el pseudónimo de “BOZ”, publicó sus primeras creaciones literarias en la “Monthly Magazine” revista editada por un colega suyo. En 1836 completó una serie de relatos que publicó con el título de “Papeles póstumos del Club Pickwick, que resultó un éxito editorial. Charles, que se había entregado por completo a la Literatura, se dio un tiempo para casarse con Catherine Hogart con la que tendría diez hijos.
 
En 1838 publicó “Oliver Twist”, novela en la que denuncia los abusos cometidos por las autoridades y clases patronales contra la gente de condición humilde y los trabajadores de su país. Entre 1840 y 1841 publicó “La Tienda de antigüedades” y “Barnaby Rudge”. En 1843 publicó “A Christmas Carol” (Un cuento de Navidad) que se convertiría en un clásico de Literatura infantil en todo el mundo.
 
Charles, el hijo de sirvientes, el ex-trabajador obrero, el hombre sin adolescencia, que superó el tortuoso camino de la adversidad, se convirtió en escritor popular. Escribía con fina ironía y gran sentido del humor, logrando así un crearse un círculo de lectores. Era autor y a la vez actor social. Leía en público pasajes de sus obras. Sus oyentes motivados rompían a reír o llorar según las escenas irónicas o dramáticas que les iba leyendo.
 
Era un escritor irónico, místico, humorístico y sobre todo un visionario adelantado en el arte literario, a pesar de que se le ha cuestionado por su exagerado patetismo, su descarnado sentimentalismo. Aún así supo desvelar las miserias, la falsedad e hipocresía, el egoísmo, las desigualdades sociales que imperaban en la sociedad inglesa del siglo XIX.
 
Charles era un innovador literario nato aunque en algunos tramos de su obra “Papeles póstumos del club Pickwick” pareciera remedar al Quijote y Sancho Panza en las figuras del sabihondo y soñador señor Pickwick y su criado Sam Séller.
 
Retrata con genialidad ambientes sombríos, como el de la fábrica de betún donde laboraba el desconsolado huerfanito Oliver Twist, las grotescas figuras humanas con los que se cruza este personaje en su deambular por los míseros antros de perdición que encubren las calles londinenses.
 
Critica a la vez las costumbres de la sociedad en que vive. Los clichés protocolares y exclusivos de los Clubs y Centros regidos por gente aburguesada, las normas pedantes de las Instituciones gubernamentales, además del conservadurismo aletargante y el puritanismo rígido que cumplían a rajatabla los representantes de una sociedad con mentalidad patronal, machista, racista, egoísta, que marginaban a las clases proletarias. Aunque Charles no se definió nunca políticamente. Como intelectual sabía que era necesario cambios políticos para remolcar esta Sociedad apalancada pero tampoco los propuso. Se conformó con la crítica social, y se afanó más en su proyección como autor de novelas. Sabía que la gente del Pueblo se mueve por sentimentalismo, y lo que él escribía era idóneo para motivarlos a sonrojarse o enternecerse, a sonreír o lagrimear. Dickens, el rey de la parodia social, del dramatismo sentimental, del patetismo humano cautivaba a la gente y gozaba de popularidad.
 
En 1850 publicó “David Copperfield”, obra donde resaltan apuntes autobiográficos. David es el mismo Charles que trabaja duramente en un almacén de Londres y que solo halla la paz necesaria en su alma en el aprecio que percibe en la familia que le da hospedaje. Aunque pronto el padre va a prisión por deudas y David huye de casa y de dirige a Dover, a casa de su tía Betsy Trotwood, mujer que lo detesta porque había preferido tener una sobrina. Por lo que se traslada a Caterbury para mantenerse y educarse con los favores del abogado de su tía, que resulta tiene una hija preciosa de nombre Agnes. Y, tras una sucesión de hechos, en los que David se casa con Dora una chica poco instruida que de pronto muere, el afortunado protagonista, que ya trabaja como escritor, desposa a la dulce Agnes y con ella llega al final feliz.
 
En su obra “Bleak House” (Casa desolada) editada en 1852, hace una crítica del sistema jurídico y judicial. En 1854 publica “Hard Times” (Tiempos difíciles) Lo hace por entregas, con temas relacionados con la clase obrera. Describe con maestría una huelga sindical y sus consecuencias. Aunque al final el personaje central, que es un obrero, se conforma manteniéndose al margen de las luchas sociales. El autor lo prefirió así, como una réplica de su propia indefinición política. En 1857 publicó “La pequeña Dorrit”, en 1861 “Grandes esperanzas” y en 1864 “Nuestro amigo común”.
 
Hacia 1865 mientras volvía de Francia con Ellen Ternan, actriz con la que mantenía relación tras haberse separado de Catherine Hogart, el escritor sufrió un accidente ferroviario que le dejaría serias secuelas psico-físicas. Aunque siguió escribiendo y desarrollando una intensa vida social y cultural. En 1867 viajó otra vez a Estados Unidos donde volvió a presentar sus obras, con lecturas públicas en algunos teatros de este país. De vuelta a Inglaterra fue recibido por la reina Victoria, y en 1869 aceptó el cargo de presidente del Instituto “Birmingham and Midlan”.Y, mientras, seguía escribiendo en el Olde Year Magazine.
 
Pero el día 9 de junio de 1870, a causa de una incontenible hemorragia cerebral, a la edad de 58 años, falleció el más notable narrador inglés de la era victoriana: Sus restos fueron enterrado en la abadía de Westminster.
 
Charles Dickens es un clásico del realismo social en la novela. Con su estilo sobrio en descripciones reales y algunas ficticias dio vida a irrisorios y conmovedores personajes que hasta hoy son reproducidos en libros y cintas cinematográficas. Y por el valor literario y la trascendencia de su obra, ocupa un lugar importante en la historia de la Literatura universal.