VÍctor Marie Hugo nació en Besançon (Francia) el año 1802 del matrimonio formado por el
militar bonapartista Léopold Hugo y Sophie Trébuchet, dama de inclinación monárquica, que
tenía ya dos hijos nacidos anteriormente: Abel (1797) y Eugéne (1800). El matrimonio se
separó, no obstante, de mutuo acuerdo, y Víctor con su madre y sus hermanos se fue a vivir al
antiguo convento de las “Feuillantines”.
Ya es sabido por todos que Víctor mostró desde niño prodigiosas cualidades para la creación
literaria. A los trece años escribió su primer libro: “Cuaderno de los versos franceses”, a los
quince años fue galardonado por la Academia francesa por su poema: “Dicha que proporciona el estudio en cualquier momento de la vida” y a los diecinueve escribió su primera novela “Bug-
Jargal”, en la que relata la vida de personajes buenos y malos, de aventureros que se ensañan con ciertos valores humanos.
En 1821, tras la inesperada muerte de su madre, Víctor, que aún no había cumplido los veinte
años, obtuvo el permiso de su padre y llevó al altar a Adèle una amiga de la infancia de la que
estaba prendado. Sin embargo, durante el banquete de bodas, vino a ocurrir un suceso
lamentable: Eugéne, hermano de Víctor, que estaba también enamorado de la novia, se volvió
loco de repente y tuvo que ser internado en un sanatorio para enfermos mentales. Fue un
nuevo difícil trance que afrontó la familia Hugo.
En 1823 el joven escritor publicó “Han de Islandia”, que despertó el interés del mundo literario
francés y lo consagró como novelista. Aunque este éxito apenas fue percibido por Víctor que
soñaba con una narrativa, que fuera capaz de capitalizar sus demonios personales, su filosofía
y su particular visión del mundo de la época. En 1824, escribió en su artículo sobre Quintín
Durward de Walter Scott: “Después de la novela pintoresca aunque prosaica, de Walter Scout,
quedará otra novela por crear, más hermosa y más completa. Una novela que sea a la vez
drama y epopeya, realista aunque también idealista, verídica y grandiosa a un tiempo, una
novela que engaste a W.Scott en Homero.”
En 1824 publicó “Odas y poesías diversas”, libro que permitió al público descubrir a un gran
creador lírico, a un magnífico poeta. En 1826 sacó a luz “Odas y baladas”, y Cromwell (drama)
con un prefacio que vislumbra ya al futuro padre del romanticismo. En 1829 su nombre vuelve a
aparecer en la portada del libro “El Último día de un condenado a muerte”, en el que aboga
contra la pena de muerte. Y en 1830 publicó “Hernani”, (drama) en cuyo prefacio vuelve a
dirigirse a los jóvenes escritores señalándoles el camino del romanticismo al que considera “la
libertad en la literatura.”
En 1831, Hugo, empeñado ya en interpretar las miserias del pueblo francés, publicó “Nuestra
Señora de París”, una novela gótica, con descripciones de la vida cotidiana y de los ambientes
oscuros de París, con protagonistas como Quasimodo, el hombre feo y deforme pero de alma
buena y generosa que se enamora de Esmeralda, la doncella pura e ingenua que anda
acompañada por su cabrita, Frollo, el preboste de alma retorcida por el fanatismo de sus ideas
religiosas, Febo el apuesto capitán que también está enamorado de la bella gitana. En realidad
la obra es un drama, donde la tragedia y el dolor son recortados por la platónica relación de
amor entre Quasimodo y Esmeralda, que nos recuerda a una versión de “la bella y la bestia”.
Entre los años 1831 y 1841, siendo ya miembro de la academia francesa, publicó “El rey se
divierte” (drama que fue prohibido por la censura), Lucrecia Borgia y Maria Tudor (dramas
históricos); “Los cantos del crepúsculo” y “Los rayos y las sombras” (poemas); Claude Gueux
(novela social) y Ruy Blas (drama romántico).
Víctor Hugo, tras el fracaso de “Los Burgraves” (1843) dejó de escribir temporalmente y se
dedicó a la política. En 1845, merced a sus buenas relaciones con liberales conservadores y
monárquicos, el rey Luis Felipe le nombró Par de Francia. Sin embargo, la revolución de 1848 y
la instauración de la segunda república le hizo cambiar de ideología política y se convertirá en republicano. En 1951, tras el golpe de estado que instauró el segundo imperio, con Luis
Napoleón a la cabeza, se ve forzado a huir del país. Pasó cuatro años en Bélgica y luego se
exilió a la isla de Guernesey donde permanecerá los siguientes quince años.
En 1862, tras haber publicado “Napoleón el pequeño” (sátira contra el emperador Luis
Napoleón), “Los castigos” (poema satírico) Las Contemplaciones” (poema lírico) y la primera
parte de “la Leyenda de los siglos”, Víctor Hugo sacó a luz la novela “Los Miserables”, que
significará -como dijo el autor- “la epopeya, el drama y la novela social de la miseria”. En este
vigoroso fresco literario, Jean Valjean será el principal personaje, el miserable que se
interrelacionará con otros miserables, como Fantine la prostituta vapuleada por la autoridad, la
desamparada hija de ésta, Cossette, a quien Valjean adoptará como hija para liberarla del
abuso de la rapieza familia Thénardier, Marius el amor escondido de Cosette, y entre otros
personajes ligados al bajo mundo social y a la política francesa, el policía Javert que intenta
capturar a Valjean desde la huída de éste de la prisión de Tolouse, y que finalmente tras
fracasar en su cometido termina arrojándose al río Sena. Esto significará el triunfo del ex
presidiario redimido de su delito de robar un pan para comer, sobre las leyes sociales
convencionales de la época.
El éxito que alcanza “Los Miserables”, anima a Víctor Hugo a seguir escribiendo desde su
forzado exilio. En 1864 publica “Wiliam Shakespeare”, en 1865 “Las canciones de las calles y
de los bosques”, en 1866 “los Trabajadores del mar” y en 1869 “El Hombre que ríe”. En 1870,
tras la caída del segundo imperio Hugo regresó a París. Lo hizo por la puerta grande; al grito de
“¡Viva Francia!” el escritor saludó a la multitud que lo aplaudió por las calles. En 1871, año en
que reanudó también su actividad política, publicó: “El año terrible”
En 1874 sacó a luz el libro “El noventa y tres”y el año siguiente fue elegido senador. Dio un
discurso a favor de la amnistía de los comuneros. En los años posteriores, el ya famoso escritor
seguirá publicando obras literarias y participando en la vida política de su país. Cuando cumplió
80 años Víctor Hugo fue homenajeado como un patriarca de las letras francesas. Pero a esa
edad, como hombre, había vivido también lo suficiente como para ver dramas y tragedias
desarrolladas en su propia familia. Desde la desaparición de su hija Leopoldina -que murió
ahogada en extrañas circunstancias-, la repentina locura de su hija Adela, la muerte de su
esposa Adéle (1868) y la de sus hijos: Charles(1871) y François-Victor (1873).
Víctor Hugo murió el 22 de Mayo de 1885; entonces se le tributó espectaculares honras
fúnebres: su cuerpo fue expuesto ante el Arco de Triunfo y luego una multitud condolida lo
acompañó hasta el Pantheón, donde fue enterrado junto a los restos de otras celebridades
francesas.
La obra literaria de Hugo cubre casi todo el siglo XIX, y ha sido reconocida por su
trascendencia estilística y el significado de los valores humanos de la que está impregnada.
Víctor Hugo está considerado como uno de los más grandes escritores que ha dado a luz la
Francia contemporánea.